domingo, 28 de noviembre de 2010

Cuando La Bella se convirtió en Bestia

Durante toda esta semana, el facebook se ha llenado de imagenes de nuestra infancia para reivindicar el derecho de los niños a ser precisamente eso, niños. Llevo muchos días rememorando imagenes de lo que sin duda fue la mejor época de mi vida, donde no había facturas, ni prisas, ni dudas, ni preocupaciones salvo dejar volar mi imaginación hasta el infinito y mas allá.Tal fue la nostalgia que me entró que quisé volver a ser esa niñita de 6 años que fue por primera vez al cine a ver una de esas peliculas que te hacen soñar "La Bella y la Bestia", 90 minutos de risas y llantos, al salir, regresaba a mi casa con una sensación que hacía años no sentía, como si aquella niña que algún día fui hubiera despertado de un largo sueño, pero al encender la televisión he visto la noticia de esa "Madre" que hizo pedacitos a su hijo de 9 años, lo metio en una maleta de mano y lo arrojo sin problema por un terraplen, eso si!!, con sus cromos y sus lápices para que la criatura se entretuviera y una gran duda me ha venido a la cabeza ¿En qué momento La Bella se convirtió en Bestia?

martes, 24 de agosto de 2010

, el mar de mi vida que arrastra el velero de mi cuerpo hacia la isla de nuestro amor.

, mi brújula de amor, mi norte de pasión, la estrella polar que me guía.

, mi pirata provocador con espada salvadora y ron embriagador.

, mi canción de esperanza, mi pentagrama de fé, la clave que aleja mi soledad.

, mi paraguas de acero que protege este alma de papel de la tormenta de mis dudas.

, mi golondrina de sueños que anida en mi alma y vuela por el viento como un pensamiento.

, mi locura racional, mi desorden armonioso, mi coherencia incomprensible.

domingo, 27 de junio de 2010

La golondrina y el viento

¿Alguna vez has pensado qué te gustaría ser sino fueras un hombre?
Yo lo tenía claro, una golondrina.
En el Molino, durante esas largas tardes de verano donde mi única compañía era mi imaginación, me pasaba horas observando a estos pájaros de plumaje negro y pico rojo.
Siempre me llamó la atención la capacidad de estos animalillos de anidar en cualquier sitio, debajo de una teja, en los huecos de los árboles, en los agujeritos de las paredes. Si cierro los ojos, aún puedo escuchar el piar desconsolado de sus crias y el cricreo de las cigarras.
Volar, poder volar, ese era mi sueño, ser libre, poder elegir ver el mundo desde arriba para que los horrores de abajo no llegaran a mí.
Entonces llegaste tú y me dí cuenta que una pequeña golondrina no podría superar la distancia que nos separa.
Viento!! Eso es lo que quiero ser, VIENTO!!
Un viento huracanado con suficiente fuerza para llegar hasta tí en cualquier momento pero que tus brazos pudiera convertir en brisa fresca y juguetona que erice tu piel, alborote tu pelo y llene tu alma de esperanza, paciencia y felicidad.

domingo, 20 de junio de 2010

El complice


Amanece, hace frío pero yo estoy ardiendo.
Hoy es el día, el fin de la larga espera.
LLego a la estación, el tren silva anunciando su llegada y sin quererlo se hace complice de mis sueños.
Me acurruco en mi asiento, sólo el suave balanceo del vagón me consuela porque dentro de muy poco el que me mecerá y acunará serán tus brazos.
Oigo una lejana voz que anuncia el fin del viaje pero yo sólo oigo y entiendo el latido desbocado de mi corazón.
Las puertas se abren y mi alma se llena de luz

sábado, 5 de junio de 2010

Algo se muere...

Tu barco no se hace pequeño aunque se aleje en el mar,
pero si siento que te voy perdiendo y lo grande que es la soledad.
Un pañuelo de silencio a la hora de partir,
un pozo sin fondo que no se puede llenar,
una huella imborrable, que grande es mi soledad!
Si hubiera podido pedirte, llorarte o suplicarte que no te fueras,
me quedarìa algo màs que este vacio que deja el padre que se va,
Algo se murio en mi alma y me hice amiga de la soledad.

domingo, 23 de mayo de 2010

¿Qué hacer?

Qué hacer cuando lo que sientes es más fuerte que tú.
Cuando el pecho te palpita con fuerza, los pensamientos atronan tus oidos, las palabras se vuelven mudas, las sonrisas huecas y las lágrimas mojan tu almohada pero nada más.
El alma, ella es la inductora de todo este desatino. Ella controla mi corazón, la razón mi cuerpo y yo en medio, montada en esta montaña rusa a la que llamo vida, que me eleva hasta el cielo para luego dejarme caer.
Sé que sólo tenemos un corazón al que deberiamos serle fiel, mientras encuentro la manera de hacerlo escribo estas líneas para poder al menos respirar.

sábado, 24 de abril de 2010

Hoy lo volvi a ver

Hoy lo volví a ver pero ya no era el mismo.
Han pasado varios meses de aquel sábado por la mañana en el que un desconocido encogió mi corazón.
No lo conozco, no sé su nombre pero nunca podré olvidar su cara.
Hay personas transparentes que con una simple mirada puedes leer su alma,
en la suya lei miedo ante un futuro incierto, tristeza absoluta que embargaba todo su ser,
abandono, duda, desconsuelo.
Me pidio ayuda: " Por favor, mi mujer me ha abandonado, necesito comprarle ropa a mi hija y no sé hacerlo, ayúdame"
Resulta que a veces es más fácil hablar, desahogarse o pedir ayuda a un desconocido que a cualquier persona de nuestro pequeño mundo.
Hoy lo volví a ver, sonreía, iba montado en una bicicleta y daba vueltas alrededor de la plaza con la pequeña Marina enganchada detrás enfundada en sus patines nuevos.
Esta vez no lei nada, sino que lo sentí, sentí que era feliz, por como sonreía, por como miraba a su pequeña y así a lo lejos me sentí feliz yo también porque el tiempo todo lo cura, o al menos calma el dolor.

¿verdad amigo?